Piropos

A todos nos gustan los piropos, pero algunos resultan aburridos por ser claramente prefabricados, poco sinceros, exagerados e incluso groseros. Para que un piropo sea agradable tienes que decir algo bonito sobre la persona o sus cualidades que sea real o al menos creible. Lo ideal es personalizar el piropo con detalles que no se puedan aplicar a cualquiera. Muchas veces es preferible no decir nada a decir un piropo desafortunado, si no se te ocurre nada que decir es mejor permanecer callado. Procura no piropear detalles que se adquieren con dinero, como la ropa, joyas, un reloj, unos zapatos, etc ya que en ocasiones pueden dar la impresión de que quien habla es una persona materialista que solo aprecia el poder adquisitivo. Nunca debes decir piropos vulgares o irrespetuosos si no quieres parecer una persona soez y sin educación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario